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Partidos como el del pasado domingo en Mestalla están
marcados en rojo temporada si y otra también por los técnicos de ambos equipos.
Por el lado local, el Valencia busca volver a los puestos Champions y devolver
a su afición una buena imagen después de la derrota 0-5 frente al Real Madrid.
Por el lado visitante, el Barça buscaba aumentar aún más su distancia sobre el
Real Madrid (había perdido) y sobre su perseguidor más inmediato el Atlético de
Madrid para afianzarse todavía más como líder en solitario. Ya es habitual que
el Barça sea el líder, lo lleva haciendo varias temporadas atrás, también es
habitual que los equipos a los que se enfrente le cogan algo de manía, por el
hecho de ir líder, pero sobretodo por ser el mejor equipo del mundo y por tener esa filosofía de juego inculcada
por Johan Cruyff. Una filosofía basada
en el juego de posición, la cual, que ha abatido a todo rival que se le ponía
por el medio, pero que ahora está teniendo que superar una serie de obstáculos.
El planteamiento por parte del técnico del Valencia fue el
correcto, esta vez acertando de pleno y no como en el día contra el Madrid
cuando se equivoco al poner en el 11 titular al argentino Fernando Gago. A
pesar de acertar el técnico fue criticado por la incursión de Ever Banega en el
11, después de todos los problemas que hubo durante la semana. Posiblemente no
se valore mucho la actitud de Valverde durante la semana, pero al igual que en
la ida de los cuartos de la Copa
del Rey fue el encargado de apagar el fuego. Otro punto a favor del técnico fue
la alineación en el once de la pareja Cissokho-Guardado para dificultar las
subidas de Dani Alves, algo que ya se hacia con Unai Emery cuando alineaba a
J.Alba y Mathieu. A pesar de tener en frente al Barça pudo recompensar el
trabajo de la semana anterior a Bernat, de ahí que fuera titular frente al
Barça.
PLANTEAMIENTO DEL VALENCIA
Como ya viene siendo habitual en los últimos encuentros del
Barça (frente a Málaga, Madrid y Valencia) el equipo rival plantea un perfil alto
en la zona de inicio del Barça,
obligándole a optar por un saque en largo a sus laterales o a un saque a sus
hombres de ataque. Este hecho provocó que Xavi Hernández bajara muchas veces a
la posición de 4, para ayudar a sacar el balón.
El marcaje a Messi, mientras que el Madrid utilizó una
especia de jaula (2 centrales + 2 mediocentros), el Valencia dejó de lado ese
idea, y en numeradas ocasiones Ricardo Costa (y en menor medida Víctor Ruiz) le
realizaron un marcaje al hombre. Esto (junto a la adelantada presión ché)
provoco que el astro argentino solo pisará una vez área rival en la primera
parte (en el disparo del penalti)
A día de hoy es casi imposible frenar toda la maquinaria
culé, pero en estas últimas jornadas se está demostrando que es posible hacerlo
durante una fase de los partidos. A pesar de estar “contra las cuerdas”
durantes unos instantes del encuentro, tienen una serie de automatismos que te
pueden crear una ocasión de gol en cualquier momento.